[REVIEW] Saints Row IV
Uno de los cambios más importantes que tuvo la franquicia que ahora pertenece a la editora Deep Silver en esta generación fue dejar de intentar ser un juego realista. El salto de...
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Uno de los cambios más importantes que tuvo la franquicia que ahora pertenece a la editora Deep Silver en esta generación fue dejar de intentar ser un juego realista. El salto de calidad de Saints Row The Third fue tal que, incluso cuando se abrieron las puertas a la comicidad, a lo bizarro, a lo divertido se mejoraron también aspectos como la jugabilidad y la historia. No estar atado a convenciones o incluso a tener que dar explicaciones lógicas de las cosas que seceden en la pantalla le saca un peso de encima al diseñador. Saints Row IV es eso, es más loco, mas bizarro y mas divertido que su predecesor consiguiendo que, por ejemplo, obviemos que transcurre en la misma ciudad que “The Third”, y por ende que la mitad de los elementos han sido re utilizados.
El juego comienza con una Mision del MI6, grupo gubernamental inglés similar a la CIA, y como intentan detener una bomba nuclear. Lamentablemente esta bomba sale disparada y nosotros, a pesar de ser el presidente de los Estados Unidos, saltamos hacia a ella. Como en los momentos más bizarros de la película Armageddon, I don’t wanna miss a thing de Aerosmith suena, dado a que nos vamos a sacrificar para salvar al mundo. Obviamente que nuestra suerte no está echada, dado a que caemos en nuestras oficinas en Washington DC donde estamos a punto de dar una conferencia de prensa. Al hacerlo una raza alienígena nos invade y secuestra. ¿Con que fin? Ponernos en una simulación donde nos controlarán por el resto de nuestras vidas. Algo sale mal, pero logramos modificar esta simulación y la convertimos en Steelport.
Al estar en un mundo virtual, las reglas que gobernaban a The Third se modifican aun más. Las armas se vuelven más locas, como por ejemplo un Inflador cuyo recipiente de un rayo laser vera como su cabeza crece hasta explotar, incluso las mejoras hacen que podamos agregarle splash damage a la explosión. La ya demás que marketineada Dubstep Gun es un arma que empezará a tocar música hasta que la música se transforma en un furioso dubstep y saldrán de él rayos explosivos. La posibilidad de tirar agujeros negros o llamar a UFOs que levanten a los enemigos… todo combinado con armas reales y que ya vimos en el juego. Para toda arma “normal”, hay una contrapartida alienígena haciendo que el repertorio de armas crezca a 30, y con cada una de ellas muchísimos upgrades. Lo curioso es que la forma de vestirnos o el color del arma hace que cambie, por ejemplo, como reacciona la dubstep gun. No… No cambiará el funcionamiento, pero si la música, haciendo que cambiar nuestra vestimenta o apariencia no sea sólo un cambio cosmético… si no dos.
El juego sigue siendo open world. De eso no hay duda. El tema es que ahora está más enfocado en la sátira y al humor, haciéndose eco de juegos como Mass Effect. ¿Cómo es esto? Bien, al igual que en el juego de BioWare, nuestro equipo se encontrará en una nave espacial entrando y saliendo a diferentes simulaciones, y con cada soldado (Homie) que reclutamos podemos acostarnos con ellos, tal como lo vimos en Mass Effect 2 y 3. No sólo este gag es parte del juego, sino que las misiones secundarias ahora son parte de las misiones secundarias de los personajes. Explicándolo de otra forma, lo que antes eran misiones secundarias, ahora son requerimientos de tal o cual personaje. Lo más interesante es que al completar varios sets de misiones se desbloquearan las misiones de lealtad. En cada una nos revelaran un poco de la historia y pasado de cada personaje, ya que entramos en la mente de los personajes, o en su simulación. Lo curioso es que el final del juego, del que no vamos a mencionar nada, es una misión similar –en esencia- a la del final de ME2 y tendrá diferentes resultados en base si hicimos estas misiones o no.
Las misiones secundarias son bastantes similares a las de The Third. Tendremos grupos de alienígenas protegiendo alguna área específica, o tal vez debemos buscar y entregar un vehículo. Tank Mayhem, la misión secundaria donde con un tanque debíamos destruir todo lo que se nos cruzase y juntar puntos sigue viva, y la contrapartida en helicóptero ha sido modificado por un UFO, pero en esencia es similar. A estos mayhem se le han agregado los de Súper poderes en los cuales nos habilitan nuestros poderes para destruir la ciudad. El mini juego de Fraude Vehicular sigue vivo, y el DLC de The Third sobre el Profesor Genki ahora es parte base del juego con un nuevo “programa televisivo” haciendo uso de nuestros poderes de súper salto, súper velocidad y Telequinesis. El último mayhem agregado es con el power armor (Un robot que podemos operar) y que cumplirá un rol importante en el juego. Los mini juegos nuevos, más alla de las variaciones a los conocidos incluyen Blazin’ donde tenemos que correr una carrera pero con nuestros poderes o porque no un “Club de la Pelea” donde solo con nuestros poderes y puños tenemos que vencer hordas de enemigos que si usan armas.
Antes de pasar a hablar de los súperpoderes, hablemos de los enemigos, en la simulación vemos a la raza enemiga que nos invadio. Progresivamente el juego nos dará enemigos que vuelan, naves espaciales, robots que le dan armadura a los enemigos y que sólo se pueden deshabilitar con poderes, robots gigantes, tanques y el peor de todos… Un Warden. Cuando el problema escala a niveles inimaginables, un Warden aparece y es, sin dudas, uno de los enemigos más complicados. Viene siempre con un escudo, y con una agilidad y fuerza que deja nulos en comparación a los enemigos. Vencerlo, nos elimina lo que en otros juegos se llama el Heat Level, o el medidor de conflicto.
Ahora si, pasemos al gran agregado del titulo… Súper poderes. Como esto es un mundo virtual, nuestra hacker puede modificar y robar códigos, esto lo sacamos con la progresión normal del juego o las sidequests de nuestros compañeros, y la verdad es que le agrega una capa de jugabilidad mas. El Súper salto nos deja –en su versión mejorada- saltar hasta dos veces la altura de un edificio promedio y a la mitad del rascacielos más alto. La súper velocidad hace que usar un vehículo deje de tener sentido ya que somos mucho mas rápido corriendo y además podemos hacer daño al correr. Tenemos telequinesis, o la posibilidad de darnos propiedades de fuego, eléctricas o hielo a nuestras balas o a quien se acerque peligrosamente a nosotros. Tambien podremos hacer un golpe al piso y un área recibirá daño, se reducirá a personajes minúsculos –y asi poder pisarlos- o dejarlos suspendidos con gravedad disminuida. Tambien podemos, estando desde una posición alta, arrojarnos al piso con nuestro puño y el daño varia entre la altura, por lo que la combinación de poderes esta demás que recomendada. Podemos tirar bolas de fuego, hielo o de control mental. Lo brillante del juego es que cada poder tiene al menos tres variaciones y las mejoras que compremos afecta a todo el grupo por lo que debemos decir que poder elegir y no que rama del poder. La forma de mejorarlos, es molesta, pero a esta altura conocida en los open worlds y esto es ítems coleccionables.
En Definitiva Saints Row IV, se ha separado aún más de GTA, y nos hace el trabajo fácil a la hora de elegir este juego o el GTA V que saldrá en algunas semanas. La respuesta es “ambos”. Si bien el juego es , en esencia similar, la diferencia es cada vez más grande. Uno se enfoca en ser lo más “serio” posible, y el otro utiliza el humor como herramienta. Podran ver la diferencia en nuestra review de GTA V el próximo mes, pero por lo pronto los invitamos a jugar Saints Row IV porque no tiene desperdicio.
Plataforma utilizada para el analisis: Xbox 360