Ambientado en el periodo Edo de Japón, juegas como Ebizo, un joven ladrón aficionado. Decide dejar atrás esa vida con su hija adoptiva después de que una misión salga mal, matando a inocentes a manos de los hombres de su gremio. Ebizo enferma unos años después y los precios de las medicinas son demasiado altos, así que vuelve a robar.

En Kamiwaza no existe el juego de sigilo puro: Sus habilidades tienen que ver más con la evasión que con la evasión, como en un juego de acción y sigilo. Esto no es Tenchu, aunque esté desarrollado por la misma gente. Puedes esquivar a los enemigos si empiezan a detectarte. Por supuesto, puedes desplazarte sigilosamente por el mapa, pero no es una forma muy alentadora de jugar. Hay muchas cosas que no están clavadas en el juego, incluido el robo. Aunque no te limitas a recogerlos, sino que atacas al objeto hasta agotar su barra de salud.

Es un sistema incómodo al que cuesta acostumbrarse, a lo que no ayudan los pobres controles y una cámara que parece mucho más antigua de lo que es. Para la mayoría de los objetos, hay que esquivar primero la detección para robarlos al instante. En un juego de sigilo, es un poco contraproducente, pero forma parte de la experiencia.

Cuanto más robes, más grande será tu mochila. Esto tiene un problema, porque atrae la atención hacia ti en el centro de operaciones. Deja tus ganancias en el centro de los ladrones con frecuencia para que la gente no sospeche de tu ridículo botín.

La mochila no sólo es un indicador extrañamente limpio de la cantidad que llevas, proporcionando un bucle de juego de riesgo/recompensa, sino que también es un arma poderosa. Puedes realizar ataques e incluso patear a los guardias para dejarlos fuera de combate. Todo esto lo digo también en sentido positivo; esta locura define claramente a Kamiwaza: Way of the Thief, y me parece muy bien. Se burla del propio género del sigilo, a la vez que se entrega a una versión más orientada a la acción. A medida que avanzas, obtienes acceso a una cantidad cada vez mayor de movimientos que te ayudarán también en tus misiones.

Al igual que en Dead Rising, el tiempo es un factor importante. Cada uno de los trabajos del juego tiene un estricto límite de tiempo y sólo puedes realizar uno a la vez. Es una experiencia desalentadora, pero al final soy un gran fan de estas experiencias de tiempo limitado. Añaden una verdadera sensación de urgencia al mundo, dando al ciclo día-noche un propósito real. Sin duda, esto no será del agrado de todo el mundo y puede resultar desagradable para algunos. Kamiwaza: Way of the Thief no te facilita las cosas y puede contribuir a que te sientas frustrado al principio del juego.

Teniendo en cuenta que se trata de una adaptación de un juego muy antiguo y de nicho, Kamiwaza: Way of the Thief muestra su edad. Lanzado originalmente en PlayStation 2 en 2006, podría decirse que ya mostraba su edad por aquel entonces. No se ha hecho mucho para mejorar el aspecto. Los modelos de los personajes tienen un aspecto especialmente tosco, y los entornos carecen de detalles y variedad. En Nintendo Switch se ve bastante bien, sobre todo en el modo portátil, pero no te va a sorprender.

Kamiwaza: Way of the Thief es un juego que muestra su edad en un montón de maneras diferentes: desde sus gráficos toscos, controles janky, y la estructura extraña. Sin embargo, es un juego con encanto y proporciona una experiencia de juego que no creo haber visto nunca. Combina los géneros de los juegos de acción en una experiencia de sigilo rápida y extraña. Si puedes pasar por alto muchos de sus defectos, te recomiendo que lo veas si sale a la venta.